Dos delincuentes fueron detenidos por un policía bonaerense herido de un roce de bala en la cabeza que fue ayudado por un motodelivery que se encargó de esposar a un ladrón que terminó baleado en la vereda a una cuadra de la estación de la localidad bonaerense de Ramos Mejía y tras un raid que se había iniciado en Tres de Febrero.
Fuentes policiales y judiciales informaron hoy a Télam que todo se dio anoche antes de las 21 cuando se reportó al sistema 911 que en la intersección de las calles Pastor Obligado y Virrey Liniers de Morón, se observó un auto Chrysler PT Cruiser de color negro, con varios ocupantes en su interior que se negaron a ser identificados y escaparon iniciándose así una persecución.
Unos 10 patrulleros de comisarías de Morón y La Matanza, dieron comienzan a un operativo cerrojo para atrapar a los sospechosos que pasaron a toda velocidad por la zona de Haedo y a pocos metros de la estación de Ramos Mejía lado norte, en la intersección de las calles Güemes y Alem, se bajaron del vehículo y comenzaron la fuga a las corridas y a los tiros contra dos policías de un móvil del Comando de Patrullas de Morón que loa venían persiguiendo.
En el lugar, hubo un intercambio de disparos en el que uno de los policías y uno de los dos ladrones que terminaron detenidos, resultaron heridos, mientras que el resto de la banda escapó en un vehículo de apoyo.
Los imputados detenidos fueron identificados por la policía como Jonathan Abel Orquiola (27) y Gonzalo Adrián Comizzo (28), y éste último es quien terminó herido de un impacto de bala en la región lumbar.
El policía herido es un sargento que sufrió el roce en el cuero cabelludo de una perdigonada de un disparo de escopeta y debió ser trasladado a Hospital Posadas en uno de los patrulleros, aunque se encontraba fuera de peligro.
En una secuencia grabada en un video de un comercio se puede observar cuando el policía herido que tenía a uno de los delincuentes tirado en el piso le pide ayuda a un motociclista que realiza delivery y pasaba por el lugar.
Este trabajador fue quien se encargó de esposar boca abajo al detenido que resultó herido, mientras el efectivo se recostó contra una persiana de un comercio tomándose la cabeza ante el sangrado de su herida.
Alberto, uno de los comerciantes de la cuadra, contó al canal TN que “el accionar de la policía estuvo perfecto” porque “no hirieron a nadie y no había gente en la calle gracias a Dios”.
“Eran dos policías y cinco delincuentes con armas largas. Detuvieron a dos y los otros tres se dan a la fuga en un auto de apoyo”, contó el comerciante.
“Los malandras tiraron a lo pavote”, contó y aseguró que el policía “tiró dos tiros” y con eso detuvo a uno de los asaltantes, mientras que su compañero “tiraba con la escopeta”.
Sobre la ayuda del delivey, aclaró que intervino cuando el sargento que estaba baleado ya tenía reducido al sospechoso y su compañero había arrestado al cómplice y lo metió en la camioneta policial.
El hombre aseguró que por lo que escuchó, la banda venía de cometer “cinco hechos más”.
Fuentes judiciales revelaron a Télam que se trata de una banda «muy peligrosa» del barrio Ejército de los Andes de Ciudadela, más conocido como Fuerte Apache.
El auto importado Chrysler en el que se desplazaban tenía pedido de secuestro por haber sido robado el 14 de abril en el partido de Tres de Febrero, cuando una banda de cuatro a cinco asaltantes lo sustrajo con armas largas.
En el interior del rodado se secuestró una pistola 9 milímetros y un revólver lechucero -ambas armas aptas para el disparo-, un televisor 50 pulgadas, varios celulares y documentación de otras víctimas.
Los investigadores creen que esta banda delictiva sería autora de raids delictivos protagonizados días anteriores en distintas partes del conurbano y todos con la misma modalidad.
Según las fuentes, el modus operandi es abordar autos de alta gama y obligar a las víctimas a llevarlos a sus domicilios y allí sustraer dinero en efectivo, alhajas y electrodomésticos, para luego abandonar a la víctima en la vía pública y cambiar de auto para continuar con los robos.
Interviene en el hecho la Fiscalía 7 de Morón a cargo del fiscal Matías Rapazzo, quien se hizo presentes en el lugar disponiendo la aprehensión inmediata de los dos malvivientes.