Las renuncias puestas a consideración derivaron en un encuentro en Casa Rosada que estuvo encabezado por Fernández, en la que estuvieron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y varios ministros, tras el cual distintos funcionarios, gobernadores, gremios, intendentes y aliados del Frente de Todos (FdT) salieron a respaldar la figura del mandatario.
A la reunión en Casa de Gobierno asistieron los ministros de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; de Seguridad, Sabina Frederic; de Producción, Matías Kulfas; de Economía, Martín Guzmán; de Trabajo, Claudio Moroni; de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; y el canciller Felipe Solá. También la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca; y la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra.
En medio de los posicionamientos, el Movimiento Evita y Somos Barrios de Pie convocaron para mañana a las 15 a una movilización en Plaza de Mayo en respaldo al Presidente, bajo la consigna «Por la unidad del Frente de Todos. A Bancar al Gobierno».
A De Pedro se sumaron luego los ministros de Justicia y Ciencia, Martín Soria y Carlos Salvarezza, respectivamente, y las titulares del PAMI y Anses, Luana Volnovich y Fernanda Raverta, además de la secretaria de Comercio Interior, Paula Español.
También hicieron lo propio los ministros Tristán Bauer y Juan Cabandie, de Cultura y Ambiente, respectivamente; el presidente del ACUMAR, Martín Sabbatella, y la directora del INADI, Victoria Donda.
La determinación de ese conjunto de funcionarios de ofrecer su salida del gabinete se conoció después de un acto que el Presidente encabezó al mediodía junto al ministro de Economía, Martín Guzmán, en el Museo del Bicentenario de la Casa de Gobierno.
En esa ocasión, al presentar el proyecto de ley de inversiones en hidrocarburos, Guzmán destacó la necesidad de «escuchar a la gente» para resolver sus problemas y remarcó que «aún quedan cuestiones muy graves por resolver» en el campo económico, como el pago de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En su discurso, Guzmán mencionó a la vicepresidenta Cristina Fernández; al gobernador bonaerense, Axel Kicillof; al presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y al jefe del bloque del FdT, Máximo Kirchner.
«Recuerdo, en estos 21 meses, ejemplos concretos que nunca olvidaremos, como el momento más duro del salto de la brecha cambiaria, hablando con el Presidente, junto a Sergio, Máximo y Axel, siempre ayudando, siempre buscando cuidar a nuestra gente», rememoró el funcionario, y citó a la vicepresidenta al destacar el concepto de la «persistencia en las convicciones».
La carta publicada por De Pedro, que inició la saga de puesta a disposición de renuncias, se conoció después de esa actividad oficial.
En la Casa Rosada, en tanto, y luego de la reunión encabezada por el Presidente, distintos ministros del Gobierno nacional, junto a la CGT, movimientos sociales, gobernadores, intendentes y agrupaciones políticas, gremiales y empresarios, expresaron su respaldo al mandatario como «síntesis de la unidad popular».
El cotitular de la CGT Héctor Daer ratificó el apoyo de la central al Presidente como parte de la «defensa de la institucionalidad» y señaló que Fernández «debe mantener la templanza».
Entre los gobernadores, Ricardo Quintela (La Rioja), Sergio Uñac (San Juan), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Oscar Herrera Ahuad (Misiones) le hicieron llegar al mandatario su respaldo a través de llamados telefónicos, del mismo modo que Juan Manzur (Tucumán); Omar Gutiérrez (Neuquén), Raúl Jalil (Catamarca) y Alberto Rodríguez Saá (San Luis).
La discusión en la coalición oficialista se produce a tres días de la realización de las PASO, en las que la alianza opositora Juntos por el Cambio (JxC) logró avanzar posiciones y relegó al oficialismo en la mayoría de los distritos, con epicentro en la provincia de Buenos Aires, que concentra casi el 40% del padrón electoral del país.